Es una pregunta difícil…
Contar con información actualizada día tras días puede convertirse en una ardua tarea si no contamos con los indicadores adecuados que recojan dicha información.
Los más lógico, a la hora de construir y establecer un sistema de recolección de información inmediata, es enlazar los indicadores a los objetivos que queremos alcanzar.
Estos indicadores, además de recolectar información, minuto a minuto, deben ser capaces de resumirla, para facilitar el análisis de la misma. Gracias a las nuevas tecnologías, la construcción de los indicadores, en muchos casos, se realiza de forma muy simple.
En los sistemas de gestión como Upicus podemos formular preguntas sobre el estado de alguna de nuestras unidades de negocio y actuar sobre estas de manera rápida y eficaz.
La información que podemos obtener, sumada a un adecuado análisis es lo que va determinar el tipo de escenario de actuación en el que nos encontramos y, por lo tanto, qué tipo de reacción amerita.
Existe un número importante de indicadores útiles para obtener los resultados. Muchos de ellos ya los utilizamos: niveles de actualización, tiempos de respuesta, etc. Al obtener la información de manera inmediata, el siguiente reto es identificar los planes de actividades que debemos llevar a cabo. Acciones a concretar sobre objetivos, campañas o incluso cambios en los procesos son algunas de las respuestas que podemos dar si nuestros indicadores recogen eficientemente la información.
En resumen, nuestra capacidad de respuesta está directamente relacionada con la forma en cómo recolectamos la información relevante y el nivel de actualización que tenga la misma.
Contar con información actualizada día tras días puede convertirse en una ardua tarea si no contamos con los indicadores adecuados que recojan dicha información.
Los más lógico, a la hora de construir y establecer un sistema de recolección de información inmediata, es enlazar los indicadores a los objetivos que queremos alcanzar.
Estos indicadores, además de recolectar información, minuto a minuto, deben ser capaces de resumirla, para facilitar el análisis de la misma. Gracias a las nuevas tecnologías, la construcción de los indicadores, en muchos casos, se realiza de forma muy simple.
En los sistemas de gestión como Upicus podemos formular preguntas sobre el estado de alguna de nuestras unidades de negocio y actuar sobre estas de manera rápida y eficaz.
La información que podemos obtener, sumada a un adecuado análisis es lo que va determinar el tipo de escenario de actuación en el que nos encontramos y, por lo tanto, qué tipo de reacción amerita.
Existe un número importante de indicadores útiles para obtener los resultados. Muchos de ellos ya los utilizamos: niveles de actualización, tiempos de respuesta, etc. Al obtener la información de manera inmediata, el siguiente reto es identificar los planes de actividades que debemos llevar a cabo. Acciones a concretar sobre objetivos, campañas o incluso cambios en los procesos son algunas de las respuestas que podemos dar si nuestros indicadores recogen eficientemente la información.
En resumen, nuestra capacidad de respuesta está directamente relacionada con la forma en cómo recolectamos la información relevante y el nivel de actualización que tenga la misma.